Cómo llevar a cabo el reciclaje de papel

El reciclaje de papel es una práctica más que necesaria. Permite dar una segunda vida a este material compuesto por celulosa en forma de fibra que procede en su gran mayoría de los árboles. Tras pasar por un determinado proceso vuelve a poder utilizarse de diferentes maneras a la vez que nos ayuda a mantener el medio ambiente de la mejor forma posible.

La producción de papel se lleva a cabo con la fibra de celulosa, este proceso tiene su fin cuando conseguimos reciclar el producto. En un principio se crea la celulosa a partir de la madera, posteriormente consiguiendo fabricar papel con la fibra virgen, lo que permite que pueda tener una segunda utilidad con el reciclado.

Empresas especializadas como Irmasol Andalucía se encargar de la recogida, transporte y reciclado de residuos no peligrosos. Sus métodos son completamente efectivos, contando con los recursos humanos y materiales necesarios para que se lleve a cabo como es debido.

¿Qué papel podemos reciclar?

No todos los tipos de papel pueden pasar por el proceso de reciclado. Lo que realmente reciclamos es la celulosa, el principal material que lo compone. Se pueden reciclar:

  • Periódicos y revistas.
  • Cajas y cartones, siempre y cuando estén limpios.
  • Folletos de publicidad.
  • Papel escrito y fotocopias.

Por otro lado, debemos tener en cuenta que no podemos reciclar:

  • Papel higiénico o sanitario.
  • Papel de fax o fotográfico.
  • Papel que esté encerado o con parafina.

Contribuir al cuidado del planeta con el reciclaje de papel es muy fácil, solo tienes que contar con los procesos adecuados para asegurarte de que estás reciclando correctamente este producto y que irá a una planta especializada en ello.

Poder separar los distintos desechos hace que puedan tener una segunda vida, promoviendo así la reducción del amontonamiento de residuos en vertederos y ayudando a que contemos con un mundo más limpio.